Como os habréis podido dar cuenta, en los últimos años las pajaritas, un complemento que parecía muerto, o casi, han vuelto a la vida, y han conseguido resurgir de sus cenizas, en gran parte gracias a colectivos como el Hipster o Alternativo.
Pero hasta hace relativamente poco, las pajaritas se usaban principalmente por hombres y casi exclusivamente en ocasiones en las que se vestía de frac o esmoquin.
Por supuesto, la pajarita no comenzó sus andadas como un complemento de moda para hombre o mujer, sino que tuvo inicios muy diferentes.
EL ORIGEN
En un principio, empezó entre mercenarios y soldados croatas en el S. XVII durante las guerras prusianas, éstos utilizaban una bufanda para poder juntar las aperturas de sus camisas. Cuando fueron a presentarse ante el Rey de Francia Luis XIV, éste comprobó que todos los oficiales llevaban dicha corbata enganchada al cuello. En Francia paso a llamarse Cravette, procedente de la palabra Croata y fue cuando empezó a darse uso de este nuevo complemento, ya que Francia era ya en esos momentos un país importante en la moda. Hasta tal punto que en la Revolución Francesa, dependiendo del bando en el que combatieras, debías llevar un color de Cravette u otro.
Esta nueva Cravette se extendió por Europa durante los siglos XVIII y XIX llegando hasta Inglaterra, donde, al igual que en Francia, se extendió primero en las clases altas. El éxito fue grande y hasta se escribieron libros sobre las diferentes maneras de atar aquel pañuelo que tanto gusto a Luis XIV. Al ser un complemento simple, siempre se trataba de innovar e incluso un periódico decidió explicar y escribir sobre infinidad de nudos y maneras de llevarla.
AÑOS 50
La próxima gran aparición en escena fue en los años 50 cuando el Ivy League Style, encontró un hueco en el Noroeste Estadounidense y en sus universidades más antiguas y de más éxito, sobre todo entre los alumnos más adinerados. En estos momentos, incluso marcas de moda tan conocidas como J. Press o Brooks Brothers tenían tiendas en las principales universidades estadounidenses como Yale, Harvard o Princeton, donde vendían pajaritas de todos los estilos, con diferentes telas y estampados.
Es aquí cuando infinidad de famosos comienzan a llevar pajarita para eventos importantes en los que había que ir elegante, tenemos ejemplos en Frank Sinatra, quien siempre salía a cantar al escenario perfectamente vestido y en más de una ocasión complementado por una pajarita, también, y en esta misma línea, todos los miembros de The Rat Pack, siendo el primero de ellos Humphrey Bogart, a su muerte, se generó alrededor de Frank Sinatra, al que seguían personajes tan icónicos como Dean Martin, Sammy Davis Jr., Peter Lawford y Joey Bishop, quienes actuaban juntos en películas, conciertos, espectáculos, e incluso en eventos políticos.
FINALES S. XX
Una vez asentada dentro de los estándares de la moda, a mediados y finales del S. XX, la pajarita vuelve a hacer acto de presencia, sobre todo en la cultura suburbana que hoy se conoce como Preppy. Esta nueva cultura convirtió la pajarita en un elemento indispensable dándole, por primera vez, enorme importancia dentro de la vestimenta, incluso en los 80s se dio un nuevo giro más y se empezaron a diseñar pajaritas para mujeres, cosa que hasta entonces era prácticamente impensable.
Es en estos momentos cuando incluso diseñadores importantes y conocidos empiezan a dar importancia a la pajarita como complemento de moda indispensable, incluyendo nuevas telas, nuevos nudos y nuevos diseños que no se habían visto hasta el momento.
Las pajaritas pasaron a ser complemento indispensable para diversas figuras muy reconocidas como químicos, ingenieros, científicos, se empezó a relacionar con diferentes trabajos o profesiones, de hecho los profesores se representaban siempre con una pajarita ya que era la prenda que supuestamente utilizaban todos ellos.
Es por estas fechas cuando se decide que los camareros lleven pajarita en vez de corbata, ya que por su estilo de profesión, deberían estar siempre en movimiento, llevando platos llenos de comida para los comensales de sus restaurantes y era mucho más fácil ensuciar o manchar una corbata que una pajarita, además, las pajaritas que llevaban, normalmente negras, siempre a juego con su traje negro y camisa blanca, nunca se movían ni incomodaban al propio camarero, que podía desempeñar su trabajo con normalidad, sin tener que preocuparse de su vestimenta.
HOY EN DÍA
Si bien es cierto que no todo ha sido un camino de rosas para nuestro complemento favorito, hoy en día vemos cómo la pajarita vuelve a resurgir y cómo, entre todos, hemos conseguido que vuelva a hacerse un hueco dentro del mundo de la moda y podamos considerarla de nuevo complemento indispensable si queremos ir a la última.
Después de haber tenido un S. XX con altos y bajos, parece ser que las pajaritas vuelven a ser un complemento de moda muy recurrente entre los más hípsters y alternativos, vuelve a recurrirse a ellas para eventos como bodas, comuniones y diferentes celebraciones, y cada vez más las vemos por la calle “un día cualquiera”.
También la volvemos a ver en famosos, tanto en alfombras rojas, como en películas, videoclips o eventos políticos, por ejemplo Pierce Brosnan haciendo de James Bond, Clint Eastwood recogiendo Oscars vestido con pajarita, o actores mundialmente conocidos como Tom Hiddleston, Kevin Costner, Gerald Butler o Alexander Skarsgard, posando en eventos importantes con pajaritas en sus cuellos.
Más importantes quizá, iconos de la moda y el estilo como Hugh Jackman, David Beckham, Matthew McConaughey, George Clooney, Leonardo DiCaprio o Ryan Gosling, han posado últimamente con nuestro complemento de moda favorito en diversos eventos y fiestas del mundo de Hollywood.
Es por todas estas razones que nosotros no queríamos quedarnos atrás, una vez decidimos que queríamos empezar una trayectoria empresarial entre los cuatro, vimos rápidamente que el mundo de los complementos de moda era una de las grandes posibilidades, no sólo por el gran número de diferentes complementos que abarca, sino también por lo llamativo de los mismos.
Quisimos desde un principio llegar al punto medio entre las tecnologías que conocemos, como la impresión 3D y la moda que tanto nos gusta, fue fácil llegar a la conclusión que con diseños en tres dimensiones, impresoras 3D y buenos materiales, podíamos ofrecer un producto de gran calidad a un precio genial y para todos los públicos.
Esperamos que os encanten nuestros productos tanto como a nosotros y que confiéis en nuestra marca como referente para los complementos de moda, en especial las pajaritas.
Muchas gracias y nos vemos en el siguiente post.